Mi alma se inunda
De congoja
De mis ojos
Se desborda de dolor
Que ha de precipitarse
En esta tierra desabrida
De alegría
Endulzada
Por la desesperación
Del hambre
Y del hombre
Que camina en busca de refugio
Para su angustia,
La llovizna
Cae sobre mis cabellos
Moja mi cuerpo húmedo y triste,
Mañana habrá otro río
Desbordado
Y otra ciudad en ruinas
También mi corazón
Azotado
Por el último huayco
Iris
El éxodo de la vida
Se asomara a tu puerta
Y otras niñas
Lloraran
Por el techo caído
Por el aguacero
Que divorcia
Y aísla la alegría,
En mi corazón
También llora
Una ciudad inundada
Y arrasada por la última lluvia.
lunes, 16 de abril de 2007
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